El objetivo de esta intervención es corregir los signos más visibles del envejecimiento en la cara y el cuello. Mejora el aspecto de la piel, haciéndola más firme.
El lifting facial, o cervicofacial, logra unos resultados muy naturales que, además, duran muchos años. No son permanentes, pero sí muy duraderos. Los primeros resultados son inmediatos tras salir de la operación y mejoran al bajar la inflamación, pasadas de 4 a 12 semanas.
El lifting facial elimina todo el tejido sobrante y la grasa del conjunto del rostro. Además, estira los músculos faciales y redistribuye la piel. Las incisiones de esta intervención se realizan en el cuero cabelludo –bajo el pelo–, en las zonas frontal y temporal, y terminan en un área cerca de la nuca. Mediante estas incisiones, los profesionales van tensando la piel y, además, pueden reducir los cúmulos de grasa.
Tras la intervención, las cicatrices quedan escondidas bajo el pelo. Hay que vendar la zona durante 24 horas y luego realizar un vendaje especial compresivo durante dos semanas.
Esta operación estética se lleva a cabo en un centro hospitalario y dura entre tres y cinco horas, aproximadamente. Es normal que la parte de la cara y el cuello queden hinchados, aunque se trata de una molestia temporal. Es una operación que es realiza bajo anestesia general, por tanto, hará falta hacerse pruebas para preparar la intervención: analítica de sangre, RX, electrocardiograma y visitarse con el anestesista unos días antes de la intervención. Al cabo de tres semanas, el paciente puede reanudar su rutina habitual.
Todos los tratamientos e intervenciones son absolutamente personalizados, los datos que damos sobre tiempos de la intervención y recuperación son aproximadas, puesto que cada persona presenta diferentes respuestas en la cicatrización.
Efectos secundarios: Toda la información en el siguiente enlace.