Mastopexia

La mastopexia o elevación de pechos es una técnica que permite mejorar el aspecto del pecho caído. En función de la forma del pecho, será necesaria o no una prótesis para darle la consistencia deseada.
Tiempo
60-180 min
Preoperatorio
Anastesia
General
Hospitalitzación
Resultados
Inmediatos
Recuperación
7-15 dias

Esta cirugía plástica está indicada para aquellas mujeres que desean la restauración de su pecho (elevación, tamaño y contorno), que está afectado por una pérdida de volumen en grasa después del parto o embarazo o de la aparición de ptosis mamaria. Por lo tanto, es una cirugía mamaria perfecta para mujeres que tengan los pechos caídos, flácidos o no simétricos. Y esto puede suceder tanto en pechos grandes como en pequeños.

¿Cómo es una mastopexia?

Este procedimiento es sencillo y suele durar entre una hora y media y cuatro horas, en función de cada paciente y de la técnica que se use. Se recomienda un breve ingreso hospitalario para controlar las primeras horas del postoperatorio, que no suele superar las 48 horas.

Normalmente, en las mastopexias se utiliza anestesia general. La cirugía se realiza mediante incisiones en la zona mamaria. La cirugía para levantar el busto sin implantes consiste en eliminar el exceso cutáneo y colocar la areola y pezón en su posición anatómica más de acuerdo con la forma de las mamas y del tórax, así como modelar la mama para devolverle la forma perdida.

Esta cirugía también incluye la mastopexia con implantes. En estas intervenciones, se coloca una prótesis bajo la mama. La mastopexia con implantes mamarios se recomienda en aquellas mujeres que, además de querer reafirmar y subir sus senos, quieren aumentar su tamaño para dar una forma más definida a su pecho.

Antes de la intervención

Es indispensable que la mujer que quiere realizarse una mastopexia tenga un buen estado de salud, en general. Que no fume, tenga un peso equilibrado y no esté embarazada (ni que lo contemple en poco tiempo). Y, obviamente que tenga las mamas caídas.

Una vez tomada la decisión, la paciente debe visitar a un cirujano plástico y estético quien le efectuará unas pruebas y análisis para estudiar la viabilidad de la operación. Las pruebas habituales son: analítica de sangre y pruebas de coagulación, mamografía, ecografía mamaria, ECG, Prueba de esfuerzo, análisis de sangre y visitarse con un anestesista.

Hará falta llevar al hospital roba cómoda para después de la operación.

Habitualmente, se estudia la zona a intervenir y, para estar a punto para la operación, se recomienda hacer unas sesiones de preparación de los tejidos y de drenaje totalmente personalizadas en función de cada paciente. Esto nos ayudará a una recuperación más rápida. 

¿Cómo es la recuperación?

Es normal que la paciente note cierta inflamación en la zona, o un leve dolor. La inflamación desaparecerá después de la primera semana de manera progresiva. Además, el aspecto final de los senos irá mejorando a medida que la glándula mamaria se adapte y reabsorba el edema.

También es habitual que al principio se experimente falta de sensibilidad en las zonas operadas, sobre todo en las partes próximas a las cicatrices, pero es temporal.

Las incisiones después de una operación de elevación de pechos se cierran con suturas, que dejan cicatrices más o menos visibles. Dependerá de las zonas por las cuales se realice la intervención. La mayoría de estas cicatrices desaparecen con el tiempo y se ocultan fácilmente con la parte superior del bikini.

Con el fin de evitar riesgos y complicaciones como infecciones o sangrados, el médico recomendará a la paciente estos consejos:

  • Usar el sujetador específico pautado por el cirujano, incluso en la cama.
  • No utilizar sujetadores con aro hasta pasados unos meses.
  • Durante las primeras horas después de la intervención, se pueden tomar analgésicos para evitar la sensación de dolor una vez desaparece la anestesia.
  • A las dos o tres semanas, acudir a la consulta médica para la retirada de los puntos.
  • Evitar levantar objetos pesados o realizar ejercicios que impliquen la zona del pecho.
  • No realizar movimientos bruscos ni rápidos.
  • Dormir boca arriba, al menos durante un mes.
  • No mojar la zona intervenida hasta que se haya quitado el vendaje compresivo que se coloca después de la mastopexia.
  • No tomar el sol de manera directa en los próximos tres meses.

Una vez el equipo médico dé el visto bueno, se recomendará sesiones de drenajes para mejorar la recuperación de la zona intervenida.

Todos los tratamientos e intervenciones son absolutamente personalizados, los datos que damos sobre tiempos de la intervención y recuperación son aproximados, puesto que cada persona presenta diferentes respuestas en la cicatrización.

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