Varias investigaciones aseguran que el exceso de grasa en el vientre puede conllevar problemas serios para la salud. Para perder esta grasa localizada es importante seguir unos hábitos de vida saludables y, en casos recomendados, se puede optar por la cirugía estética.
El peso de una persona viene marcado por las calorías que consume durante el día, las calorías que quema con el ejercicio y su edad. Estos tres factores son clave a la hora de entender por qué se acumula grasa en el abdomen.
Es decir, si se come demasiado y no se hace suficiente deporte, se suman kilos al cuerpo. Por lo tanto, también a la barriga. Y, a medida que una persona va cumpliendo años, la grasa tiende a acumularse en muslos, caderas y abdomen, sobre todo en el caso de las mujeres.
Pero no solo eso. En la acumulación de grasa abdominal también influyen la propia genética, las malas posturas o los cambios hormonales.
Consejos para reducir barriga
Es importante prestarle atención a este exceso de grasa. Y es que la grasa visceral –la que se encuentra en la zona del abdomen y rodea órganos internos– es la culpable de una serie de sustancias tóxicas que dan lugar a la resistencia a la insulina. Esta está relacionada con la hipertensión o la diabetes, pero también puede originar problemas respiratorios.
Por lo tanto, quemar grasa visceral no únicamente es perder tamaño de barriga. Es también la mejor manera de prevenir futuras patologías cardiovasculares, problemas del sueño, obesidad o diabetes, entre otras enfermedades.
En los casos en los que lograr un déficit calórico y practicar ejercicio no asegura el éxito, se puede optar por la medicina estética. Aquí es imprescindible siempre hablar con expertos que garanticen la seguridad del paciente en todo momento.
Uno de los procedimientos quirúrgicos más demandados es la abdominoplastia, también conocida como cirugía del abdomen. Con esta operación se reconstruye la pared abdominal, y está especialmente indicada para reducir el exceso de volumen y la flacidez de la piel en esta zona del cuerpo.
Otro de los casos habituales en los cuales la abdominoplastia está recomendada es el de las mujeres que han tenido uno o varios embarazos con un aumento importante de peso durante la gestación. Es decir, esta cirugía también es una solución para eliminar las estrías que comúnmente aparecen después de un embarazo o cuando se ha tenido una pérdida de peso considerable.
Gracias a la operación de abdominoplastia, se puede eliminar grasa localizada, que en muchos casos es el detonante para otras enfermedades, como la obesidad o la diabetes. Además, este tipo de cirugía permite:
Tras realizarse una cirugía plástica de abdomen, el paciente deberá llevar una faja especial reforzada con un vendaje. Los diez primeros días suelen ser los más complicados y es probable que se note un poco de dolor e incomodidad.
Si el paciente tiene un trabajo sedentario, podrá regresar a las dos semanas de haberse realizado esta cirugía plástica. Si no, retomará por completo la vida normal, como máximo, a las cuatro semanas.
Por otro lado, tras esta intervención hay que evitar la práctica de deportey cualquier actividad extrema que pueda causar tensión durante cuatro – seis semanas.
Durante la recuperación, se recomienda, en cuanto se note mejoría, salir a caminar, pese a que el paciente note dificultad para estirarse. Es importante, poco a poco, ir moviéndose.