Hidratar e iluminar la piel, reafirmar, reducir las marcas de acné, mitigar arrugas y poros dilatados… El microneedling, o terapia de inducción de colágeno, es una novedosa técnica que se usa para rejuvenecer la piel.

Forma parte de los tratamientos anti-aging, y se considera una mesoterapia de superficie, consistente en estimular la epidermis superficial con un sistema de microagujas. Con ello se consigue abrir los canales para mejorar la absorción y la penetración del producto con el que se realiza el tratamiento, ya sean vitaminas, ácido hialurónico, DMAE, etc.

Estos ingredientes interactúan con el componente químico de la piel y logran mejorar su sistema y su apariencia, otorgando a la dermis un aspecto más joven. Por ese motivo, el microneedling hace que los productos que se utilizan en los tratamientos de cuidado facial funcionen mejor.

A pesar de ser un método basado en pinchazos, es mucho menos doloroso de lo que parece, ya que se utilizan agujas diminutas que únicamente provocan una pequeña molestia y que consiguen resultados visibles desde el principio.

Los principales beneficios del microneedling

Con el microneedling conseguimos combatir distintos problemas de la piel y en diferentes partes del cuerpo. A diferencia de otros tratamientos estéticos, este tratamiento se puede realizar en todos los tipos de piel, con buenos resultados. Estos son sus principales beneficios:

• Hidrata, suaviza, reafirma y tonifica la piel.

• Reduce las marcas causadas por el acné o la varicela.

• Combate las arrugas y los poros dilatados.

• Aporta más luminosidad a la piel y activa los procesos de regeneración.

• Resalta la belleza natural del rostro.

¿El microneedling tiene contraindicaciones?

Se trata de una técnica segura, pero, como todos los tratamientos, lo ideal es consultar primero con el médico si su aplicación es aconsejable en nuestro caso particular. Existen algunos casos en los que se desaconseja optar por el microneedling:

• Pacientes embarazadas o lactantes.
• Alérgicos a alguna de las sustancias que se quieren infiltrar.
• Sensibilidad a las anestesias.
• Pacientes con enfermedades hemorrágicas, diabetes o infecciones activas (por bacterias, hongos, herpes o verrugas).
• Personas que se expondrán al sol antes y después del tratamiento.

Los tratamientos pueden consistir en varias sesiones de, aproximadamente, unos 30 minutos de duración. Una vez realizadas, puede aparecer una discreta inflamación en la zona tratada que luego desaparece con el paso de las horas.

Tras el tratamiento (durante unas horas), es recomendable evitar acudir a lugares húmedos, exponerse de forma directa al sol, someterse a temperaturas extremas o mojarse la piel (en saunas, gimnasios, playas, piscinas, etc.).

Los resultados son inmediatos, pero su efecto completo es gradual, por lo que los podremos apreciar mejor pasados diez días.

Es importante mantener la piel hidratada durante la recuperación postratamiento. Como las microagujas traspasan la barrera cutánea y pueden dejar la piel más sensible por un tiempo, se aconseja emplear productos para pieles sensibles.

Si quieres rejuvenecer tu aspecto de forma efectiva, el microneedling puede ser la solución que buscabas. Acude a tu centro de referencia y déjate aconsejar por los expertos. Conseguirás no solo tapar imperfecciones, sino eliminarlasprogresivamente.

Dr. Isidre Martí
Clínica Estética Atlántida