La función natural de las cejas –como la de las pestañas– es la de proteger los ojos de posibles agentes externos. Se trata de una parte del cuerpo moldeable que, además, imprime un determinado carácter a nuestra expresión facial.
A la mente nos vienen imágenes de políticos con las cejas extremadamente marcadas, rostros de artistas con unas cejas sutiles y sensuales o la imagen de conocidos cuyas cejas son uno de sus rasgos definitorios. Y es que esta parte del cuerpo ejerce de marco para el rostro y, si su forma está bien elegida, armoniza las facciones de cada persona.
Estilos y tendencias
Como ocurre con casi todos los aspectos de la moda, actualmente existen tantas tendencias y estilismos como podamos imaginar. Con el maquillaje y la depilación sucede lo mismo: todas las ideas son válidas.
En cuanto al cuidado de las cejas, aunque en tiempos pasados sí han existido tendencias muy marcadas al respecto (hace unas décadas, por ejemplo, se llevaban las cejas extremadamente delgadas), hoy en día, lucir unas cejas anchas y pobladas, finas y largas o muy curvadas depende del gusto de cada uno. Aun así, hay que tener en cuenta que optar por una forma u otra puede determinar nuestra expresión, endureciéndola o suavizándola, otorgar mayor intensidad a la mirada o realzar las facciones, especialmente los pómulos, la forma de los ojos, la frente y la nariz.
- Grosor y largura: Cada persona debe encontrar la forma que mejor le siente. Para ello, hay que tener en cuenta factores como la distancia entre el párpado y la ceja, el tipo de peinado (si lleva flequillo o no), la prominencia de los pómulos o de la nariz y el tamaño y la profundidad de los ojos. Las personas con ojos grandes pueden lucir cejas largas. Sin embargo, aquellas que tengan los ojos pequeños deberían optar por cejas que no sobrepasaran la largura del ojo, para evitar empequeñecerlos aún más. Del mismo modo, unas cejas pobladas endurecen la expresión, mientras que las cejas delgadas pueden matizar una frente pequeña.
- Arco: La forma y la curvatura de las cejas determina nuestra expresión. Hay personas que optan por depilarlas en forma deV invertida, otras las prefieren rectas y hay gente que se decide por un punto intermedio. La curvatura de las cejas puede ser algo natural (si al depilarlas se mantiene su forma original) o manipulado (cuando se les da forma para crear un nuevo arco). Por ejemplo, las personas con los párpados pequeños pueden disimular este rasgo arqueando la ceja en mitad del ojo. No obstante, siempre que se intente cambiar la forma hay que ser prudente o ponerse en manos de un profesional.
Trucos e ideas
Antes de dar forma a las cejas, se recomienda peinarlas hacia arriba y hacia fuera. De este modo es más sencillo determinar qué pelos deben ser eliminados.
Hay personas que se depilan las cejas con cera, aunque algunos especialistas recomiendan utilizar las pinzas en su lugar, por varios motivos: permiten ser más precisos, minimizan el riesgo a equivocarse y su uso es más cómodo. Además, los tirones para eliminar la cera contribuyen a que el músculo del párpado se vuelva flácido y pierda su elasticidad, ya que se trata de una zona altamente sensible.
Aunque nos depilemos las cejas en casa, es aconsejable acudir a un profesional dos o tres veces al año, para que les dé la forma adecuada y solo tengamos que hacer el mantenimiento.
El maquillaje (lápices específicos del mismo color que las cejas) puede disimular pequeños errores cometidos en la depilación. También existen sombras y perfiladores que permiten definir o rellenar las cejas si son muy finas.
Algunas recomendaciones
Estas son algunas cosas que debes tener en cuenta para mantener unas cejas bonitas y cuidadas:
- Primera vez: Con un poco de habilidad, nosotros mismos podemos mantener la forma de las cejas. Lo recomendable es acudir a un profesional la primera vez, para que diseñe la forma que mejor armoniza nuestras facciones –y para que nos muestre cómo debemos depilarlas en casa–, y, a partir de ahí, nosotros podemos ir retocándolas a medida que pasa el tiempo.
- Utensilios: Cada persona puede emplear el método que prefiera para depilarse las cejas. Los más utilizados son la cera (para la que se necesita mucha precisión) y las pinzas (ideales para pequeños retoques del día a día). De este modo, en función de la técnica elegida, necesitaremos cera –en papeles depilatorios o líquida–, pinzas, una crema hidratante para aplicar tras la depilación y, obviamente, un espejo.
- Bolso: Unas pinzas y un espejo pequeño casi no ocupan espacio. Nunca sabemos cuándo vamos a poder necesitarlos, por lo que no está de más llevarlos en el bolso.
- Intactas: Algunos trucos permiten que nuestras cejas permanezcan intactas. Un poco de laca, cera, gomina, vaselina o espuma evitará que las cejas se despeinen.
- Forma: Lucir unas cejas finas, espesas o curvadas depende del gusto de la persona, pero también de la moda del momento. No obstante, hoy en día existen tantas tendencias como gustos y todo tipo de diseños están aceptados.
Las cejas resaltan y potencian la mirada. Tienen más importancia de lo que solemos pensar, pues son un rasgo muy característico e identitario de nuestro rostro. ¡No te olvides de ellas y perfecciónalas a tu gusto!